tag:blogger.com,1999:blog-16276108.post2909923520149651157..comments2023-11-02T08:50:26.274+01:00Comments on Llamame Plissken: Él dijo, ella dijo: El milagroPlisskenhttp://www.blogger.com/profile/03454405839083825163noreply@blogger.comBlogger3125tag:blogger.com,1999:blog-16276108.post-28906030285382623692010-07-12T03:58:39.209+02:002010-07-12T03:58:39.209+02:00Pablo, que somos campeones, que aún no me lo termi...Pablo, que somos campeones, que aún no me lo termino de creer... Campeones del mundo, narices, campeones... ¡¡España campeona del mundo!! ¡¡Un abrazo eufórico desde Elche!!Plisskenhttps://www.blogger.com/profile/03454405839083825163noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-16276108.post-55656764636580083422010-07-11T18:45:30.151+02:002010-07-11T18:45:30.151+02:00¡Qué buen género! Además, que casi siempre se ve v...¡Qué buen género! Además, que casi siempre se ve venir el final: canasta que entra sobre la bocina, home-run, gancho a la cara o lo que sea; y no por ello deja de emocionarnos. <br /><br />Me ha llegado esta entrada y espero que esta noche también me lleve otra alegría en la película deportiva de nuestra vida.<br /><br />Un abrazo!<br />PabloPablohttps://www.blogger.com/profile/17321525425621336005noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-16276108.post-49704100463701641752010-07-11T15:04:23.875+02:002010-07-11T15:04:23.875+02:00Como aficionado al cine deportivo, género muy quer...Como aficionado al cine deportivo, género muy querido en otras cinematografías pero completamente dejado de lado por el cine español -algo muy curioso dado el enorme peso del deporte en nuestra cultura- he visto decenas de films que glosan victorias épicas, carreras de deportistas míticos o fracasos épicos. Cuando España llegó a la final de la Eurocopa volví a ver El milagro como una especia de automotivación. Las semejanzas eran muchas: un grupo nuevo repleto de juventud y talento que formaba un grupo compacto, un entrenador sensato, mesurado, que se echaba sobre los hombros toda la presión del equipo, unos rivales superiores y el peso de saberse históricamente condenados a papeles secundarios en campeonatos similares. Los minutos finales de la película me siguen poniendo los pelos de punta, y a falta de un ejemplo cinematográfico patrio similar, recurro de nuevo a las palabras sentidas y épicas de Herb Brooks y a la emoción del comentarista deportivo que narró el evento para animar a los nuestros y para desear que esta noche, todos podamos celebrar un milagro.Plisskenhttps://www.blogger.com/profile/03454405839083825163noreply@blogger.com