Llega el mes de diciembre. La capital de España está conquistada por las luces navideñas, los puestos de la Plaza Mayor venden cachitos de Navidad a precios populares europeos y el ajetreo reina en la ciudad. Pero un irreductible grupo de frikis resisten y madrugan día tras día para acercarse hasta la Casa de Campo a satisfacer sus más irrefrenables impulsos. Los de conocer a sus autores preferidos. Los de completar los huecos de su colección. Los de comprar las últimas novedades. Porque estamos a primeros de diciembre y eso quiere decir que un nuevo Expocomic está a punto de abrir las puertas del pabellón de Cristal para acomodar en su interior a las hordas de coleccionistas, amantes del comic, despistados, otakus y profesionales que a lo largo de los próximos días convertirán a Madrid en la capital del cómic.
Tras varios años consecutivos acudiendo a la cita con el evento -uno de los más agradecidos y con un altísimo porcentaje de éxito en cuanto a consecución de firmas, gracias al que a día de hoy es el más cabal y sensato sistema de organización de las mismas- nos vemos obligados por cuestiones de conveniencia económica a mantenernos en barbecho y recuperarnos de los excesos del último mes. Nos perderemos, muy a nuestro pesar, las exposiciones dedicadas a Fernando Fernández, Esteban Maroto, Luis y Romulo Royo o a Emile Bravo. Nos participaremos en la gran variedad de actividades que ofrece el salón, como diversos talleres, presentaciones, el concurso de Trivia DC, las clases magistrales de Tony de Zuñiga o Bit/Cafu (la del año pasado de David López fue una pasada), o los habituales maremagnums del Cosplay y el karaoke.
Y por supuesto, con todo el dolor de nuestro corazón, no podremos acudir a las sesiones de firmas de autores como Vicente Alcázar, Alfonso Azpiri, BIT, Sergio Bleda, Emile Bravo, CAFU, Carlos Diez, Tirso Cons, Leandro Fernández, José Fonollosa (¡Miau!), Forges, David López, Esteban Maroto, Jesús Merino, Rodolfo Migliari, Agustín Padilla, Carlos Pacheco, Cels Piñol, Kenny Ruiz, Angel Unzueta, Enrique Vegas, y sobre todo los que para un servidor son el trío cabeza de cartel de un año que ya apabulla por la cantidad y calidad del resto de invitados, y me estoy refiriendo a los señores Tony de Zuñiga, Rick Leonardi y (ayyy) un Jon Bogdanove al que no podré pedirle un adusto y colosal Acero, al que nadie ha dibujado nunca mejor que él. Pero como se suele decir en casos parecidos, mi pérdida es su ganancia, así que desde aquí los mejores deseos para todos los que puedan disfrutar de un evento tan especial e importante como Expocomic. Si gustan de tener más información sobre sesiones de firmas, exposiciones o logística no dejen de pasarse por la completa web dedicada al Expocomic... ¡¡Y abríguense, demonios, que a las siete de la mañana en la Casa de Campo de Madrid hace un frío polar!!