Una de las mejores experiencias en las Jornadas de Avilés del pasado año fue conocer a Al Barrionuevo, joven dibujante argentino que venía de ilustrar una larga etapa del Hombre Murciélago, guionizada por A. J. Lieberman y no exenta de cierta polémica entre los aficionados por su calidad intrínseca -o más bien su falta de la misma-. Para un servidor la saga de Silencio contra los bajos fondos de Gotham y el Señor de la Noche queda como un digno exponente del mejor tebeo de entretenimiento: guiones fluidos que no inventan la rueda pero que te atrapan y te hacen interesarte por la historia y un dibujo sobrio con una narrativa bastante clara y asequible para toda clase de lectores y una espectacularidad adecuada a las historias. Vamos, que no desentonó en absoluto esa etapa de Batman junto a otras publicadas al mismo tiempo como fuera la de Gabrych y Woods, por ejemplo. A mí se me ocurrió pedirle una fémina del bat-universo, y cosa infrecuente, una que no había dibujado en demasiadas ocasiones, con lo que ocurrió lo que tenía que ocurrir: que nos volvimos locos buscando una referencia para el antifaz y la gorguera de Harley Quinn. Pero al final no le quedó nada mal al caballero el dibujo, no señor.
Posteo además la imagen escaneada en dos versiones: sin y con retoque de contraste, para apreciar mejor el trazo a lápiz, tan esquivo a la hora de ser escaneado y dejar una impresión fiel del trazo del dibujante.