No todo en un salón del comic es comprar compulsivamente tebeos descatalogados y figuritas molonas y hacer colas a los autores. Año tras año FICOMIC propone una serie de alternativas más relajadas y contemplativas, en forma de exposiciones. Este año había bastantes de ellas, algunas más atractivas para un servidor que otras, y otras abiertamente decepcionantes. La de Asterix se me escapó, pero sí que disfruté por partida doble de la expo de originales de Guarnido para Blacksad: planchas a color, preliminares y paneles contextualizando cada album. Además, dando la bienvenida a los visitantes, un Blacksad apalizado con el que queríamos habernos echo una foto y al final no pudimos.
Sin duda la decepción del año en cuanto a exposiciones se refiere fue la dedicada a 300, minúscula, con poco material y poco interesante. Con la expectativa levantada por el film de Zach Snyder, y la avalancha de compras del album derivadas de la buena recepción de la película, se ha perdido una buena ocasión para realizar una exposicíon más atractiva.
Sin embargo, no hay ningún pero al espectacular montaje de la exposición dedicada al clásico autor español Víctor de la Fuente, repleta de planchas originales que recorren gran parte de su carrera y ubicadas en un escenario con forma de saloon del oeste.
(Plissken esperando a los pistoleros para un duelo al sol. O eso o recuperándose momentaneamente del agotamiento entre cola y cola.)
2 comentarios:
Habia mas expos:
como la del jueves (eso era una expo?) o la del tebeo valenciano, sintiendolo por Alvaro no me gusto nada de nada.
La de Asterix ya que lo hablamos, lo mismo, pequeña, fea y marginada en una esquina. Eso si, la primera vez que veo en un salon que se hace cola para ver una expo, todo sea dicho.
Y nos dejamos dos: la de Pablo Auladell que más parecía una zona de descanso que otra cosa y una autores noveles o jóvenes a la que no presté demasiada atención, y eso que son la cantera...
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