A duras penas llegamos vivos al ecuador de este lunes. Después de cuatro días de saloneo por Barcelona, de turismo fugaz y shopping compulsivo, de asistir a un concierto espectacular y de llegar a casa con un vuelo que acumuló una hora de retraso y nos lanzó a una cola -otra, je- de sufridos pasajeros en espera del obligado taxi, de arreglar los areneros de los gatos y deshacer las maletas, nada mejor que ponerse a trabajar como un condenado a galeras y mentenerse al pie del cañón durante la jornada laboral. Hacía tiempo que no tenía un lunes de estos, y la verdad es que viene bien para constatar que por muy malo que pueda parecer un lunes cualquiera, SIEMPRE habrá otro mucho peor.
Pero tampoco me quejo de corazón, porque si los palos con gusto no duelen, el cansancio acumulado y el sueño atrasado son las mejores muestras de cuatro días bien aprovechados y disfrutados en buena compañía. Para esta semana quedan las crónicas de lo que fue para un servidor este Salón, y un repaso al concierto del sábado (del cual la canción que cierra esta sección es un cumplido avance), la primera tanda de dibujos allí conseguidos y si el tiempo lo permite una selección de las cinco novedades del salón que yo destacaría por encima del resto.
Ah, les avanzo para mitad de semana, en primicia, el nacimiento de una lista de correo abierta a todos aquellos coleccionistas de arte original que quieran entrar en contacto con otras personas que compartan su afición, intercambiar experiencias -buenas o malas- o lo que se tercie. Pero no adelanto más acontecimientos. Permanezcan atentos a las pantallas de sus ordenadores y recuerden que, ademas de serme fieles, deben tener mucho cuidado ahí fuera. Nunca se sabe detrás de qué esquina puede esconderse un francés.
Pero tampoco me quejo de corazón, porque si los palos con gusto no duelen, el cansancio acumulado y el sueño atrasado son las mejores muestras de cuatro días bien aprovechados y disfrutados en buena compañía. Para esta semana quedan las crónicas de lo que fue para un servidor este Salón, y un repaso al concierto del sábado (del cual la canción que cierra esta sección es un cumplido avance), la primera tanda de dibujos allí conseguidos y si el tiempo lo permite una selección de las cinco novedades del salón que yo destacaría por encima del resto.
Ah, les avanzo para mitad de semana, en primicia, el nacimiento de una lista de correo abierta a todos aquellos coleccionistas de arte original que quieran entrar en contacto con otras personas que compartan su afición, intercambiar experiencias -buenas o malas- o lo que se tercie. Pero no adelanto más acontecimientos. Permanezcan atentos a las pantallas de sus ordenadores y recuerden que, ademas de serme fieles, deben tener mucho cuidado ahí fuera. Nunca se sabe detrás de qué esquina puede esconderse un francés.
Wish you were here
Pink Floyd
So, so you think you can tell
Heaven from Hell,
Blue skys from pain.
Can you tell a green field
From a cold steel rail?
A smile from a veil?
Do you think you can tell?
And did they get you to trade
Your heros for ghosts?
Hot ashes for trees?
Hot air for a cool breeze?
Cold comfort for change?
And did you exchange
A walk on part in the war
For a lead role in a cage?
How I wish, how I wish you were here.
We're just two lost souls
Swimming in a fish bowl,
Year after year,
Running over the same old ground.
What have we found?
The same old fears.
Wish you were here.
Heaven from Hell,
Blue skys from pain.
Can you tell a green field
From a cold steel rail?
A smile from a veil?
Do you think you can tell?
And did they get you to trade
Your heros for ghosts?
Hot ashes for trees?
Hot air for a cool breeze?
Cold comfort for change?
And did you exchange
A walk on part in the war
For a lead role in a cage?
How I wish, how I wish you were here.
We're just two lost souls
Swimming in a fish bowl,
Year after year,
Running over the same old ground.
What have we found?
The same old fears.
Wish you were here.
8 comentarios:
Mi vuelo tambien tuvo hora y media de retraso, lo llego a saber y nos despedimos otra vez!!!
Calle, calle, que a nosotros nos encerraron en el avión para evitar que escapasemos y luego nos tuvieron allí dentro una horita. Hasta aplausos entre el pasaje hubo cuando despegó el aparatejo de marras. ¡Ya nos despediremos en septiembre otras veces, jejeje!
Una lanza a favor de los franceses (que por lo visto en realidad son belgas), que parece que este año se han compportado mejor que otras veces. Yo los sufrí en un par de colas, y más o menos se comportaron sin hacer ningún truco tipo David Copperfield. Igual el año pasado terminaron escarmentados o algo.
Impresionante tambien el chico del trolley, dando vueltas sin parar por el salón tirando de la maleta y con sensación de andar perdido (eso sí, por lo menos se llevó un dibujo de Bernet, que yo lo ví).
es que venir a barna es hacer cola incluso para mear, siento los retrasos de avión yo el sábado al mediodía ya me batí en retirada y puedo jurar que cuando llegue a casa no me podía ni mover, bueno la pro sima en avilés o en la Coruña.
Pablo:
Al parecer lo que sucedió más bien es que mientras que se les cortó el rollo se vieron obligados a comportarse, pero el sábado mostraron una cara más "ácida". Al parecer la Dama Dragón llegó a las manos con otro aficionado y la organización se vio obligada a separarlos generando un mal ambiente considerable. En fin, mientras respeten mi espacio vital, y sobretodo el de Leticia, ningún problema. Ahora bien, que mientras que, por poner un ejemplo, usted hacía seis horas de cola para Guarnido, sin moverse, como un estólido guerrero espartano, el tipo que iba tras Leti estaba consiguiendo un dibujo de McNiven. Y es de eso de lo que me quejo: colas dobles por todo el morro, guardar el sitio a sus colegas que están en otras colas -y viceversa. La paciencia y la constancia son cualidades de un buen sketch-buster, la desvergüenza y la ubicuidad me temo que no. PEro vamos, que nada en comparación con el primer año, de todas maneras, y porque la gente cada vez más pierde la paciencia.
Juan:
O para cenar ;)
Pero en fin, que merece la pena, vamos. Unas horitas y luego un recuerdo para toda la vida.
el problema con la retaco asiatico-cojonera fué que la gente para la cual estaba guardando cola no apareció cuando les tocaba el turno y no dejaba pasar al siguiente hasta que no llegaran sus colegas... demencial
Milo, a mí estas cosas me dan un mal rollo que te cagas por el ambiente que generan, porque es muy fácil generalizar partiendo de las conductas extremas de unos pocos y tal, pero le digo que si llego a estar allí aplaudo al tipo que tuvo narices de hacer lo que tocaba. Por lo demás,menudo panorama.
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