sábado, octubre 06, 2007

Crímenes de guerra: ¿Quién mató a Stephanie Brown?

Las consecuencias de una saga tan dramática como Juegos de Guerra no podían quedar relegadas a un simple epílogo, y DC prolongó durante un par de meses la historia en el arco argumental Crímenes de Guerra. El control que Batman había ejercido en la ciudad durante los últimos años, el statu quo en el hampa criminal, su plantel de aliados, todo ha quedado reducido a cenizas tras la desastrosa cadena de acontecimientos iniciada inconscientemente por Spoiler y que culminó con su sangrienta muerte provocada por las heridas sufridas a manos del nuevo líder del crimen organizado de Gotham, el letal Máscara Negra.




La muerte de Stephanie Brown ha provocado una honda conmoción en aquellos que la conocieron. Batman vuelve a sentir el peso insoportable de la culpabilidad por tener en parte sobre su conciencia la muerte de otro aliado juvenil. Batgirl añora a la que antaño fuera su amiga y Robin todavía llora la muerte de su novieta a la vez que se echa la culpa de todo lo acontecido. Mientras tanto, Mascara Negra continua cimentando su omnímodo poder sobre el crimen organizado gothamita aprovechando que Batman está reajustando su modus operandi tras la pérdida de apoyo en la policía y sobre todo la ausencia de Oráculo como apoyo para sus actividades.

En esta tesitura aparece un misterioso líder reformista promoviendo la “Campaña por la culpabilidad”, Aaron Black, que parece tener pruebas irrefutables que amenazan con salpicar tanto a la figura pública del periodista Arturo Rodríguez (posible colaborador de Máscara Negra) como al propio Batman, pues asegura saber toda la verdad sobre la cruel muerte de Stephanie Brown. Lo más terrorífico de esa revelación es que asegura tener la certeza de que Steph/Spoiler llegó al Hospital de Leslie Thompkins en estado crítico, pero que se logró estabilizar su condición hasta el punto de que no habría que haber temido por su vida. Las muertes comienzan a sucederse en el entorno del Hospital y Batman descubrirá la aterradora verdad: las pistas destapadas por Aaron Black, que no es otro que el Amo de las Pistas (antiguo villano y padre de Stephanie), señalan que alguien dentro del hospital dejó morir a la muchacha. La polvareda pública provocada por Black/Cluemaster le convertirá en el objetivo tanto de Máscara Negra como de un recuperado Joker, con Batman haciendo todo lo posible para que haya el menor número posible de bajas en esa guerra a tres bandas. La violencia se apodera una vez más de las calles de Gotham y el Caballero Oscuro vuelve a caminar por el filo de una navaja que esta vez sí le dejará una profunda cicatriz.




Y llegados a este punto, nos encontramos con el momento más polémico de toda la saga (y eso es decir mucho cuando entre otras perlas hemos visto como se torturaba a una menor o como se asesinaba a otra en el transcurso del asalto a un instituto), ya que la revelación final sobre la muerte de Spoiler ha levantado ampollas entre muchos aficionados –un servidor entre ellos-. Leslie Thompkins, la doctora filántropo que lleva trabajando décadas al servicio de los pobres y necesitados en el Callejón del Crimen, la mujer que acogió al huérfano Bruce Wayne y le dio su cariño y su apoyo, una de las escasas personas junto con Alfred que, sin pertenecer al circo superheroico, conoce todo lo relativo a Batman y su cruzada, esa mujer, nada menos que dejó de suministrar a propósito las medicinas que una muchacha en estado crítico necesitaba para superar sus graves heridas y gracias a las cuales se habría recuperado. Homicidio por omisión de auxilio faltando además a los más elementales principios no ya del juramento hipocrático, sino a los mantenidos contra viento y marea por la propia doctora Thompkins a lo largo de toda su vida. Se ha achacado a Bill Willingham –excelente guionista en Fábulas que aquí se ha columpiado de lo lindo- la gratuidad de esta resolución argumental, pues va totalmente contra el personaje y lo aniquila completamente como tal. Leslie Thompkins queda fuera de la Leyenda del Murciélago y con un acto de barbarie premeditada arruina toda una vida dedicada a la entrega generosa hacia los demás. En las últimas menciones sobre el particular (como en la serie 52) la muerte de Spoiler es atribuida directamente a Mascara Negra, no mencionándose nada sobre Thompkins. Si se trata de un reseteo de la continuidad con carácter retroactivo, o simplemente del hecho de que esos acontecimientos no son del dominio público es algo que el tiempo –y futuros guionistas- dirán.



El equipo creativo de estos números viene a ser la continuación de los equipos vigentes en la saga Juegos de Guerra, produciéndose la mayor cantidad de cambios en el apartado gráfico. A los guiones encontramos a Andersen Gabrych, Devin Grayson, Bruce Jones, Will Pfeiffer y Bill Willingham (que parece haber centrado en él las iras del fandom), mientras que el arte corre a cargo de Giuseppe Camuncoli, Pete Woods, Eddy Barrows, Ron Randall y Tom Derenick.

2 comentarios:

JON OSTERMAN dijo...

Buena secuela de la trílogía "Juegos de guerra". Imprescindibles ambas para todo fan de Batman, que se precie de serlo. Saludos.

Plissken dijo...

Jon, si el final hubiese sido otro habría podido quedar como una de las grandes historias de Batman de los últimos años, pero jorobar de esa forma el personaje de Leslie es algo que deja un regusto amargo, por lo menos a mí. De todos modos, eso no quita que todo lo que hay antes de la revelación final resulte entretenido y espectacular. ¡Y el Joker que sigue con la manía de eliminar a los villanos que no le tienen en cuenta!

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