Una de mis lecturas de cabecera durante la adolescencia fue sin duda alguna The Question, el comic que actualizaba el personaje clásico de la Charlton creado por Steve Ditko en los años 60 y homenajeado por Alan Moore en Watchmen a través del personaje Rorschach (bueno, no sé si homenajeado, reescrito o deconstruido se aplicaría mejor a lo que hizo Moore). El tono seco de las aventuras del periodista Vic Sage en la corrupta Hub City, las violentas -y a menudo con final desgraciado- historias que en aquel comic se desarrollaban me impactaron profundamente. Por no hablar de toda aquella filosofía zen que destilaban personajes como Richard Dragon o la cínica ironía de pensadores pragmáticos como Aristoteles Rodor. Aún hoy hay algunas historias que cuento entre mis favoritas all-time, como la incursión junto a Flecha Verde en la guarida de unos modernos Butch Cassidy y Sundance Kid citando continuamente las enseñanzas de Sun-Tzu o el episodio en que Question/Sage era enterrado vivo por un comando de fuerzas especiales y había de enfrentarse a ellos con su oratoria y resistencia física como únicas armas.
Los originales disponibles de esa colección hasta hace poco eran tan escasos como anodinos, así que cuando vi la oportunidad de conseguir esta página (perteneciente a un especial fuera de colección) no pude resistirme. El estilo dinámico de Cowan a la hora de planificar las páginas y coreografiar las escenas de lucha queda más que patente, así como un par de planos de esos bellezones que él dibujaba (Myrna y su melena de leona fueron casi, casi un mito erótico de juventud). El entintado corrió a cargo de Rick Magyar, un profesional más que competente que estuvo vinculado a otro comic de género negro de la época, Vigilante. Lamentablemente, y como suele ocurrir, a los dos meses de acoger este original de gran tamaño en casa -tanto que apenas sí cabía en el escáner- apareció otra página a la venta con una composición de página aún más trabajada y una escena tan característica del personaje que no pude resistirme a pujar por ella. Pero claro, esa es otra historia.
2 comentarios:
Sólo te falta una de Gulacy del DHOKF para terminar de montar la peli de chinos. Y como bien dices, muy lograda la sensación de movimiento.
Buf, calle, que los Deadly Hands se cotizan bastante... Demasiado diría yo. Cowan es otro de esos dibujantes que desapareció en los 90 y poco más se supo -lamentablemente- de ellos.
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